El acceso al agua potable y a saneamiento es un derecho humano[1]. Contar con agua en cantidad suficiente y de buena calidad garantiza poblaciones con mejores condiciones de vida y salud y es un recurso indispensable para el desarrollo sostenible.
El DNP, a través de la Subdirección de Agua y Saneamiento, coordina y diseña políticas públicas encaminadas a garantizar el acceso al agua, promoviendo la coordinación y la cooperación intersectorial, además de un enfoque integrado y holístico de la gestión del agua.
El Plan Nacional de Desarrollo
“Colombia Potencia de la vida" posiciona por primera vez en la historia del país, al agua como protagonista del desarrollo, lo que requiere unir esfuerzos de diferentes sectores para armonizar los diversos usos del agua con la conservación de las fuentes hídricas superficiales y subterráneas.
Durante los próximos años Colombia dirigirá sus esfuerzos en el cierre de brechas de acceso, lo que debe ir de la mano con la adaptación a la variabilidad climática y la gestión del riesgo en el sector de Agua Potable y Saneamiento Básico.
El avance en la financiación y el fortalecimiento a la gestión comunitaria del agua son estrategias claves para llevar agua de buena calidad a las zonas rurales, de difícil acceso y afectadas por el conflicto armado.
Adicionalmente, se avanza en un cambio de enfoque que permita implementar la economía circular en la gestión de los servicios de agua potable y residuos sólidos para aprovechar, de manera sostenible, los recursos y materiales.
[1]Resolución 64/292, la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU, 2010)